Dentro de las ciberamenazas, el ransomware es una de las más frecuentes, siendo una de las mayores causas de paralización de actividad de las empresas. Para situarnos, consiste en la instalación de un tipo de malware en nuestro equipo que bloquea los datos o los dispositivos informáticos y se amenaza a las víctimas de mantenerlo bloqueado hasta que no se pague un rescate al atacante.
En la actualidad, los ciberdelincuentes han ido perfeccionando los tipos de ransomware creando nuevas técnicas de extorsión, en ocasiones se realizan una doble extorsión a la víctima, amenazándole que si no paga el rescate, en primer lugar no desbloquearan sus datos y en segundo lugar le robaran todos los datos e incluso los publicaran. En algunos casos, los ciberdelincuentes amenazan con un ataque de denegación de servicio distribuido (DDoS) causando así un bloqueo total de la empresa y sus fuentes más cercanas.
Según estudios efectuados por Hiscox o IBM Security entre un 53 y un 61 % de las empresas pagan un rescate bajo el convencimiento de recuperar con éxito todos los datos, pero no siempre es así, es por ello que se recomienda no pagar los rescates exigidos por las siguientes razones:
- El pago del rescate no garantiza el acceso a los datos ni al desbloqueo de los diferentes medios afectados.
- Si pagas cabe la posibilidad que vuelvas a tener otros ataques con posterioridad, toda vez que el atacante ha podido comprobar la solvencia de la empresa.
- Incluso en caso de volver a ser víctima, pueden solicitarte una cifra mayor para el rescate.
- Si pagas fomentas el negocio de la ciberdelincuencia.
PREVENCIÓN
– Implementar políticas de control de acceso
– Actualización y mantenimiento constante de las herramientas de ciberseguridad
– Mantener copias de seguridad externas
– Formación de la plantilla en ciberseguridad
En caso de ser víctima de un rescate desde NQAbogados Penal le ofrecemos todo el asesoramiento y defensa necesarios para poder hacer frente a la situación y restituir la actividad de su empresa.